Dentro de un inmueble que alberga cientos de personas, las rutas de evacuación son un trayecto o recorrido con señalamientos que dirigen a un espacio seguro en caso de sismo o incendio; este tipo de vía es utilizado para salir de un edificio ante la presencia de un siniestro, permitiendo que fluya la gente sin causar accidentes de camino hacia la salida.

Una ruta de evacuación debe constar de los siguientes elementos:

• Acceso a la ruta de salida: Esta sección se refiere al camino que se debe seguir desde cualquier área del centro de trabajo hasta llegar a la ruta de salida propiamente dicha. Es vital que este acceso esté claramente definido y libre de obstrucciones para garantizar una evacuación rápida y segura.
• Ruta de salida: Una vez en la ruta de salida, esta parte del recorrido se distingue por estar aislada de otras áreas mediante elementos que aseguran un camino protegido hacia la salida del edificio. La ruta de salida es crucial para guiar a las personas de manera segura y eficiente hacia la salida.
• Descarga de salida: Este es el segmento final de la ruta de evacuación. Conduce directamente a un espacio seguro fuera del edificio, comúnmente conocido como punto de reunión. La descarga de salida es fundamental, ya que representa el enlace entre la ruta de salida y el punto donde las personas pueden estar a salvo y se pueden contabilizar tras una evacuación.

Cada uno de estos componentes es un eslabón crítico en la cadena de seguridad de evacuación y debe ser cuidadosamente planificado y mantenido.

Es importante que estas rutas de evacuación sigan las pautas señaladas por la Norma Oficial Mexicana NOM-002-STPS-2010 o cualquier actualización de la misma.

• Es fundamental que las rutas de evacuación en cualquier edificación estén claramente señalizadas y visibles, acorde a lo establecido en normativas como la NOM-026-STPS-2008 o la NOM-003-SEGOB-2011, o sus versiones actualizadas. Esto asegura que en situaciones de emergencia, las personas puedan identificar rápidamente las salidas.
• Además, estas rutas de evacuación deben mantenerse siempre libres de cualquier tipo de obstáculo que pueda dificultar el paso seguro de los trabajadores y demás ocupantes del edificio. La accesibilidad y la movilidad son clave para una evacuación eficiente.
• Otro aspecto crucial es la iluminación de emergencia. Las rutas de evacuación deben contar con sistemas de iluminación que se activen automáticamente en caso de corte de energía eléctrica o falta de luz natural, permitiendo así que el suelo y cualquier cambio en su superficie sean fácilmente perceptibles.
• En cuanto a la distancia de evacuación, desde cualquier punto del interior de un edificio hasta una salida segura, esta no debe superar los 40 metros. Si la distancia es mayor, el tiempo total para evacuar a los ocupantes a un lugar seguro no debe exceder los tres minutos.
• Es importante destacar que las escaleras eléctricas pueden ser utilizadas como parte de las rutas de evacuación, siempre y cuando se asegure previamente el corte de energía y se detenga su movimiento. Por otro lado, los elevadores no deben considerarse como una opción segura en las rutas de evacuación, especialmente en casos de incendio.
• Además, cualquier desnivel o escalón presente en los pasillos y corredores de las rutas de evacuación debe estar debidamente señalizado, siguiendo las normativas mencionadas anteriormente. Esto ayuda a prevenir accidentes durante la evacuación.
• Por último, en el diseño de escaleras de emergencia exteriores en nuevos centros de trabajo, es crucial que las ventanas, fachadas de vidrio o cualquier otra abertura no representen un riesgo durante una emergencia de incendio.